Cuando conocí la pregunta ¿Qué
hay allí? Es cuando ya a mis 40 años puede saber qué es lo que hay allí, para
muchos soy alegre, genero confianza, tengo resiliencia, pero para otros soy
bravo, tengo ira contenida, soy poco esforzado, pero nadie pregunta que hay
allí, pero esa pregunta no le corresponde a nadie responder sino solo a mí.
Reconocí que desde pequeño
siempre hacia lo que los demás quería, de pronto por aceptación, que me quieran
o por que en verdad no me interesa entrar en conflicto, pero ¿Qué hay allí?,
con el tiempo me di cuenta que quería más a los demás que a mí mismo y con el
tiempo eso me estaba haciendo daño, porque ya al generar fortaleza en mi ser,
comencé a darme cuenta que habían cosas del cual no estaba de acuerdo y comencé
a cuestionarme que también quería cosas a mi favor, así que tome decisiones para
que las cosas fluyeran a mi favor, de pronto todo lo que sentía que merecía lo
quería obtener de manera rápida y así tome acciones que hicieron daño a los
demás, no era mi intención tampoco hacer eso, pero conciencia me decía que
debía buscar un balance.
Si, son 40 años, MIS 40 AÑOS,
para muchos será tarde para generar conciencia, para otros muchos será UNA
PERDEDERA DE TIEMPO PENSAR EN ESO, pero para mí ES MI MOMENTO,
CADA QUIEN TENDRA SU MOMENTO, entendí durante mi proceso que unas personas
le molestaba que no tuviera sueños o metas, pero así viví, posiblemente mis
sueños en esos momentos eran simples, de rutina, pero para otros, LES PARECIA ABSURDO
NO IR MAS ALLA, allí entendí que los otros querían verme en otro escenario y como
siempre para hacerlos felices, cedi para tenerlos contentos, PORQUE ASI
SOY YO, UN SER QUE BUSCA HACER FELIZ AL OTRO, pero bueno, eso me llevo a
comportamiento poco coherentes, agresividad, ira y decisiones que me generaron
angustia, pero aprendí y doy gracias a eso.
Reflexiono sobre si podría
haber hecho las cosas de otra manera, siempre hay un 50% en mi mente que me
dice que sí, pero eso forma parte de la aceptación y aprendizaje del ser
humano.
Ahora hay personas y cosas en
mi vida que me funciona, que no me funcionan, en ocasiones cedo, en otras no,
pero eso ya no me genera angustia, si no me quieren o me quieren, proviene de ellos, no de mi, estoy aprendiendo a fluir, debo decir algo
cierto, he soltado muchos juicios, todavía me queda en el pensamiento aquellas
personas que no ceden tan fácil, pienso
entonces – Eso afecta mucho, no creo que sean felices, yo tampoco lo fui, pero creo que debemos
estar preparados para los cambios.
Reitero, ahora siento que
fluyo mejor, posiblemente me cargare con las barreras de alguien en algún momento, pero forma parte del
vivir en una sociedad, el de antes por estar tan preocupado de hacer feliz a
los demás, se entristecía, se arrodillaba, se hacia la víctima, callaba… puede
ser que ahora solo me calle, porque el callar es símbolo de prudencia
y no de miedo en mi presente.
El de antes está muerto y lo
mate aprendiendo a amarme tanto a mí mismo que ahora veo en los demás
comportamientos que desde mi juicio no son sanos emocionalmente para mí, pero igual
soy alguien de servicio, sus comportamientos hacia mí me demuestran que soy
importante para ellos, pero ahora veo sus barreras, ya no me las cargo… ahora fluyo.
Solo hay algo que me cuesta
entender al momento de demostrarme lo mucho que me quiero y es... que tan
importante son los demás para mí, posiblemente lo son, los amo, pero ahora más me amo a mí, se lo que quiero, cuando lo quiero y como lo quiero y no
dependo de nadie para lograrlo, y lo que quiero ahora es algo que siempre he
querido, vivir de lo simple, me gozo el camino, sin cargar a nadie de mis
temores o sacar en cara mis reconocimientos.
Hay algo que descubrí y es que
no requiero de los demás para ser feliz, ya que esta en mi serlo, vivir y
sentir que todo lo que me rodea sea desde la fuente de mi FELICIDAD.
No hay comentarios:
Publicar un comentario